lunes, 28 de junio de 2010

El alma abierta

Tengo una sonrisa que ocupa mi rostro y me repito, me convenzo, me digo, me pido y afirmo nadie me la va a quitar, hoy es un día nublado, un día lluvioso, pasé la noche en vela haciendo mis maletas, pasé la noche pensando en esa noche en que el mundo se detuvo y dejo de girar, estoy listo, he regresado y voy a vivir con el alma abierta.

Todo está preparado, las paredes están vacías, en el closet sobra espacio y la maleta esta lista, salgo a dar una vuelta antes por el vecindario que hoy se ve distinto, hoy lo veo con un dejo de nostalgia, con sabor a recuerdo, con muchas ganas, te voy a extrañar, pero sé que alguien más te hará suyo, te vivirá con tantas ganas y dejará en tus calles su recuerdo, avanzó con cautela, quiero llevarme lo más que pueda y recuerdo y vuelvo a recordar y sigo recordando, tantas cosas que hemos pasado.

Estoy convencido que esté no es un adiós definitivo, prometo visitarte, pero sobre todo prometo hablar de ti de vez en cuando, no importa si aquí he llorado, de todo he aprendido, hace un poco de frío, supongo que más vale que me acostumbré, esa vieja melodía, la vieja de esa puerta, mi vieja ruta, mi vieja vida, eso quedará en tu marco, en ese perfecto marco combinado con los colores de otoño y el sabor de la primavera, que me marcho un verano, pero que un invierno me tendrás de vuelta.

Se me empieza hacer un poco tarde, no me quiero despedir y sonrió como un tonto, me ganan los nervios y te prometo que un día me tendrás de vuelta, vuelvo a casa a paso prisa, vuelvo a casa a paso lento, vuelvo a casa que estoy a punto de no volver por mucho tiempo, entró a ella y lo siente, pero sobre todo yo lo siento, voy a extrañar tanto y más a todos los que han sido mi hogar y me han permitido depositarme en su ser, voy a extrañarlos tanto, pero sé que no me voy vació.

He decidido esperar el taxi fuera, veo mi reloj y veo que pasa el tiempo y veo pero no veo lo que quiero, una parte de mí espera que te aparezcas y me digas “no imagino la vida sin ti, quédate a mi lado”, otra parte tiembla al pensar que podrías llegar tomarme de la mano y decirme “sí, quiero casarme contigo” y otra más se va a sentir un poco decepcionado si no llegas a mi lado.

Aprieto el puño y me preparó para cualquiera de los finales alternativos, para las sorpresas que te toman por sorpresa, para esas vueltas locas que toma la vida sin preguntar algo y mientras espero me colocó los audífonos y escucho y digo “ah, esa melodía”, me roba una sonrisa y compruebo que mejor decisión no pude haber tomado, llega el taxi y con ello me doy cuenta que no llegas tú, ya no hay prisa, ya no hay pausa, simplemente hay un mundo lleno de posibilidades.

Quiero pedirle al chofer que todavía no emprenda la marcha, quiero darte tiempo, pero ya no es el momento, me alejo y con ello se queda atrás eso que un día fue muy mío, el tiempo pasa, yo paso sobre el tiempo, el tiempo se detiene, pero yo ya no me detengo, tú y yo siempre vamos a tener una historia, pero es tiempo de continuar y pasar a la historia, te amo con tanta locura que he decidido emprender esta aventura.

No hay comentarios:

Publicar un comentario